El tipo de calzado deportivo que use depende de los movimientos involucrados en el deporte o actividad que realizará. Usar el calzado deportivo adecuado brinda el apoyo, la absorción de impactos, la tracción y la protección necesarios para mantener el pie funcionando correctamente y libre de lesiones y estrés. Para correr, las zapatillas deben ser livianas, flexibles y construidas para absorber el impacto; Las zapatillas de tenis y baloncesto deben ser de apoyo y capaces de manejar movimientos laterales, paradas repentinas y giros. Las zapatillas de entrenamiento cruzado son apropiadas para actividades deportivas generales, como entrenamientos en el gimnasio con pesas y equipos de ejercicio. Si usted o su hijo participan en múltiples deportes o actividades, asegúrese de tener un calzado apropiado diseñado específicamente para cada actividad.

Los zapatos deportivos deben tener un ajuste cómodo para minimizar la fricción, que puede provocar ampollas e irritación. Dependiendo del deporte, la altura de la parte superior (diseño de corte bajo, tres cuartos o de caña alta), los cordones y la construcción de la suela pueden variar. Los zapatos deportivos construidos adecuadamente tienen una construcción robusta, parte superior de cuero o lona, ​​una suela flexible en la parte delantera del pie, amortiguación adecuada y soportes para el arco.

Es importante recordar reemplazar regularmente el calzado deportivo desgastado para evitar el desgaste de los pies debido a suelas desgastadas, contrafuertes del talón debilitados y arrugas evidentes en la parte superior. Los zapatos para caminar o correr deberían durar alrededor de 400 millas. Las zapatillas deportivas para baloncesto, tenis y ejercicio aeróbico deben reemplazarse aproximadamente cada 50 horas de uso.