La osteoporosis, o huesos débiles y quebradizos, puede afectar los pies antes que otras partes del cuerpo, lo que provoca fracturas por estrés. Todos los huesos de su cuerpo, incluidos los de los pies y los tobillos, pueden beneficiarse de cantidades suficientes de calcio y vitamina D. El ejercicio y el entrenamiento de fuerza con regularidad también pueden ayudar a fortalecer sus huesos.