Las almohadillas de grasa protectoras a lo largo de las plantas de los pies se degeneran con la edad, lo que puede causar problemas en los pies a las mujeres mayores. La mayoría de las personas en general experimentan algún tipo de problema en los pies con la edad; sin embargo, es importante saber que los problemas en los pies pueden ser un síntoma de varios problemas de salud graves, como diabetes, mala circulación, problemas nerviosos y artritis. A la primera señal de un problema en los pies, las mujeres mayores de 65 años deben comunicarse con un proveedor de atención médica, como un podólogo, para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. Nunca se deben ignorar los cambios en la apariencia del pie, así como el dolor repentino y crónico.
Para mantener los pies sanos, las mujeres mayores de 65 años deben seguir las siguientes sugerencias para el cuidado de los pies:
- Revísese los pies y las uñas de los pies todos los días, o pídale a otra persona que los revise para ver si hay cambios. Consulte a un podólogo si nota que algo se ve diferente o inusual.
- Mantenga una buena circulación en las extremidades inferiores: camine con frecuencia, evite sentarse durante largos períodos con las piernas cruzadas y sin levantarse para estirarse y moverse, levante los pies cuando esté sentado o reclinado, hágase masajes en los pies regularmente, mantenga los pies calientes y no fume .
- Manten tus pies limpios y secos.
- Use zapatos que le queden bien, soporte y amortiguadores con una parte superior suave que se adapte a la forma del pie. La suela del zapato debe ser flexible y tener buena tracción para evitar resbalones y caídas. Un zapato que cause presión o fricción o carezca de amortiguación y soporte puede generar problemas en los pies y los dedos.
- Los desgarros o cortes en la piel del pie también pueden provocar una infección.
